domingo, 7 de abril de 2013

Guerra Contínua

¿Qué mas puedo hacer? Dime como hacerte feliz.
Dime como puedo hacer para que esto se detenga.
Que no haya más gritos ni reproches, ni más odio en la mirada.
No lo sé. No sé que quieres de mi, nunca parece ser suficiente.
Pero, ¿sabes qué pasa? Que ya no queda nada.
Por dentro mi corazón sigue latiendo, mis pulmones recogiendo aire,
mi cerebro sigue activo, pensativo.
¿Que pasa con lo de más allá? ¿lo que no se ve?
¿Lo que no se palpa ni se estudia? Lo que la ciencia desconoce.
Yo te diré lo que pasa. 
Esta podrido, desgastado, muy cansado.
Quizás nada de lo que hiciste o dijiste fue adrede, solo fueron el calentón del momento.
Pero he de decirte que calentón a calentón, insulto a insulto, aquello que creemos invisible, sufre.
Ahí estoy yo, o eso creo. Desgastada por dentro, sin fuerzas para luchar, para buscar una solución.
¿Solución? ¿A caso la hay?
Tantas veces me lancé en su busca y tantas veces fracasé que ya no me molesto en volver a buscar.
¿Para qué? Si nunca parece ser suficiente para ti.
He decidido tomar la vía fácil, bueno la menos difícil, la fácil la descarte hace tiempo.
Esperare, buscare cobijo en... No lo sé. Dónde me acojan y me hagan estar a gusto,
donde me olvide de los problemas por un segundo, ahí es donde me refugiaré cuando 
quieras comenzar otra guerra. Buscaré mi propia trinchera.
No te haré frente porque tengo todas las de perder. Dejaré que pase el tiempo hasta que me vaya.
¿Irme a dónde? Me es igual, a día de hoy cualquier lugar parece mejor sitio que este.
Siento ser tan dura con mis palabras, siento ser tan débil en espíritu.

En esta guerra contínua, tu apuntas a bocajarro, yo... Yo amortiguo bien el disparo.







No hay comentarios:

Publicar un comentario